La carrera hacia la autonomía en el transporte ha alcanzado un punto de inflexión con la expansión del servicio de pago de Waymo, el gigante de conducción autónoma respaldado por Alphabet Inc., a Los Ángeles la semana pasada. Este movimiento representa una apuesta significativa, agregando una tercera metrópolis a San Francisco y Phoenix y señalando la confianza en la madurez del servicio para comenzar a cobrar por él.
Sin embargo, el lanzamiento en Los Ángeles se vio empañado por un video que mostraba uno de los vehículos de Waymo en Chandler, Arizona, conduciendo directamente hacia una obra en construcción. Aunque el equipo de Waymo agradeció el señalamiento del problema, este incidente subraya los desafíos que enfrentan las empresas de conducción autónoma.
Las imágenes de percances y confusiones en la conducción autónoma, compartidas ampliamente en las redes sociales, han sembrado dudas y escepticismo entre las autoridades locales de transporte, bomberos, fuerzas de seguridad y grupos de trabajadores. A pesar de los avances graduales, el optimismo sobre la implementación de robotaxis es nulo.
A pesar de todo, las empresas avanzan, como Zoox de Amazon.com Inc., que ahora ofrece viajes al público en Foster City, California, en su lanzadera autónoma construida a tal efecto, persisten los desafíos. A pesar de la promesa de un futuro autónomo, la realidad actual muestra que estas tecnologías aún no están libres de fallas y riesgos.
El caso de Cruise, cuya gestión del incidente en San Francisco llevó a la suspensión de su licencia en California, es un recordatorio de los desafíos regulatorios y de seguridad que enfrentan estas empresas. Además, los datos muestran una tendencia decreciente en la financiación de la tecnología de vehículos autónomos desde su punto máximo en 2021, lo que sugiere una creciente cautela entre los inversores.
Aunque empresas como Baidu, Pony.ai y WeRide continúan probando y expandiendo sus servicios de robotaxis en China y otros lugares, la implementación exitosa en Estados Unidos se ve lejana. La próxima entrada de Tesla Inc. en el mercado de robotaxis, programada para agosto, promete agregar otro jugador importante a la competencia.
Pero, las incógnitas persisten. ¿Será el «robotaxi» de Tesla realmente autónomo, sin conductor humano a bordo, como el concepto de Zoox y Cruise? Elon Musk ha esbozado una visión ambiciosa, pero la realidad del día a día plantea desafíos significativos que aún deben superarse.
En última instancia, mientras las empresas continúan luchando por superar los obstáculos técnicos, regulatorios y de seguridad, la implementación exitosa de robotaxis en Estados Unidos parece ser un objetivo que aún está fuera de alcance, pero que sigue siendo perseguido con determinación y avances graduales.