¿Día agotador? ¿Enfadado en exceso? ¿Muchos problemas y pocas soluciones? Si te sientes así, estas siete técnicas -y varios plus adicionales- te ayudarán a descargarte de este exceso de emociones tóxicas que no te permitirán disfrutar, en forma positiva, de otros momentos de la vida.
- Toma un momento de silencio. Empieza por un minuto cada dos horas durante todo el día. Destinando sólo un minuto inicialmente, para subir gradualmente hasta los 5 minutos continuados cuando estés dispuesto, el silencio es una de las mejores herramientas para bajar los excesos de estímulos exteriores, las emociones que definimos como negativas y adentrarnos en un espacio de quietud. Tan sólo un minuto te devolverá el equilibrio vital y la tranquilidad. Al principio, deja pasar cualquier pensamiento que irrumpa. Con la práctica continuada y consciente, tu respiración se hará más lenta -y no tan superficial, en la parte de arriba de los pulmones, como cuando estás furioso-. Lo ideal es que lo hagas tantas veces como requieras, y que lo incorpores más adelante en tramos fijos en tu agenda. Las personas que lo practican -ya sea bajo el rótulo de meditación o mindfulness, mente plena en el presente- son hasta un 33% más positivas para resolver problemas.
- Escribe en tu diario de problemas y soluciones. El inconsciente reconoce tal cual se dan las órdenes que ejecutamos. Por lo tanto, aprende en la proporción exacta a lo que tú le envías. Cuando estás en desafíos, si le envías mensajes desalentadores, eso es lo que recordará sobre la experiencia que vives. Escribir una lista sencilla, donde en una columna pones el problema, y en la otra, cómo lo resolviste o las posibles soluciones, te ayudará a tomar perspectiva. A la vez, entrenarás tu fortaleza interna en saber que puedes lidiar prácticamente con todo lo que se va presentando, aumentando tu auto confianza.
- Escucha música. Prepara tus listas de música en el móvil; ordena tus CD o vinilos en forma particular, para acudir a ellos cada vez que lo necesites. Mover el cuerpo es un excelente ejercicio que te devolverá al equilibrio que parecía que habías perdido. Pon música alegre si necesitas elevar tu energía y ánimo; utiliza melodías relajantes para estar en silencio. E, incluso, escucha la música de tu corazón, en absoluto silencio. Todo esto te ayuda a descargarte de los problemas.
- Desconecta el móvil. Si deseas re equilibrar tu energía, toma minutos de aislamiento de la tendencia a la hiper conectividad. El móvil y sus aplicaciones generan adicción, según nos explica la ciencia. Es importante que canceles y silencies, o directamente apagues el aparato, cuando desees recobrar la calma.
- Mira videos de paisajes con música tranquila. Observar paisajes naturales, o bajar de Internet videos con sonidos relajantes y proyectarlos en tu trabajo o al regresar a casa, te ayudará a bajar los decibeles en días complejos. Permítete percibir cómo van cambiando tus emociones de negativas a neutrales, y luego a positivas.
- Haz 3 respiraciones profundas en un ritmo de 4/4/6. Un método muy sencillo para adquirir auto dominio emocional es entrenar la respiración. El método 4/4/6 es sencillo, lleva pocos segundos, y tiene una alta efectividad probada, puesto que oxigena mejor el cerebro. Inspira por nariz dividiendo la toma de aire en 4 partes. A continuación, contén el aire durante 4 segundos. Finalmente, suéltalo por la boca, en una frecuencia de 6. Repite tres veces el proceso completo.
- Mira al cielo, arriba y adelante. Sin importar dónde y en qué circunstancias te encuentres, puedes descargar la tensión y cualquier emoción negativa dedicando unos minutos mirando al cielo; ya sean las nubes, las estrellas, o el reflejo del sol. La clave está en que tomes perspectiva de que hay algo superior acompañándonos, y estamos protegidos bajo ese manto infinito. Cuando camines, pon tu cuerpo erguido, la cabeza levemente hacia arriba y los ojos mirando hacia el horizonte: te ayudará a empoderarte. Se llama la postura del superhéroe, y permite que ganes en auto confianza.
En cuanto a aromaterapia, te ayudará incorporar una fragancia a limón en tu espacio de trabajo o el hogar: estimula las emociones positivas, la creatividad y permite una mejor segregación de endorfinas, las hormonas de la felicidad que están en el cerebro. Trae mayor claridad y sensación de apertura interna. Y hay más: otros recursos muy efectivos, aunque parezcan demasiado simples, son el recibir un buen abrazo de alguien que te quiere de verdad, reducir unos días tu consumo de cafeína y de tabaco si es que fumas -lo ideal sería que dejes esta adicción tan nociva-, el respetar al menos ocho horas de sueño, y tener un block de notas al lado de tu cama, para no desvelarte por ideas que aparecen en mitad de la noche: las registras, y las retomas en el nuevo día. Como observas, son técnicas muy sencillas y de corta duración. Lo importante es que puedas incorporarlas y practicarlas lo suficiente, hasta obtener tu maestría personal, para aplicarlas rápidamente cada vez que lo necesites. Y más aún: si deseas obtener el máximo beneficio de estas enseñanzas, con la práctica continuada empezarás a hacerlas naturalmente, y no te volverás tan sobre-reactivo ante los problemas y situaciones.
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