En uno de sus geniales cuentos, Sir Arthur Conan Doyle, nos cuenta cómo Watson queda más que sorprendido al enterarse de que Holmes no sabe que la tierra gira alrededor del sol. Holmes, con su calma habitual, menciona que su mente es un templo, y que la imagina como un conjunto de archiveros que no son finitos. Por el contrario, debe escoger y seleccionar cuidadosamente la información a colocar en dichos archiveros, y de la misma manera, ordenarlos de forma meticulosa para cuando sea necesario recurrir a esa información. Si ésta no es relevante, o no tiene nada que ver con su trabajo, simplemente la desecha. Elegante, presuntuoso, y con la firma de Holmes, es uno de los pocos pasajes con los cuales no estoy tan de acuerdo con nuestro detective favorito. La idea de los archiveros es genial, y de hecho así es como veo mi mente también, sólo que además de archiveros, veo más bien mi mente como un gran laberinto de muchas bifurcaciones, en ellas, puedo encontrar espacios lúdicos, libros, cosas de mi trabajo, lo que me hace feliz, e incluso lo que no me gusta, ya que considero igual de importante saber lo que no quieres, con el fin de no caer de nuevo en los mismos errores. Es por esto que llenar esos archiveros de cosas que tal vez no sean de importancia es indispensable, le dan un valor intangible a nuestras vidas. Por lo que les presento (suenan tambores): 5 consejos que no te servirán de nada en tu vida profesional.
- Ten una mascota.
Esta es sencilla. Tener una mascota hace tu vida más feliz en muchos sentidos. No hablemos de la compañía, o de aprender a tener responsabilidades, es un ser vivo, con el que creas un vínculo único. Aquí podría dejar de escribir, pero tengo que decir que no es nada fácil, y es ahí donde radica su importancia. He aprendido más acerca de paciencia al entrar a mi casa y encontrar mi televisor y sillón destrozado, que en cualquier trabajo. Si a eso le agregamos el que sea una excusa para que salgas de tu casa, así como un arma indiscutible para conocer gente, la lista podría seguir, pero creo que con esto es suficiente. 2. Aprende un oficio que no tenga nada que ver con tu profesión. No sólo basta con ser bueno en tu trabajo, hace falta que te distraigas, que explores nuevos mundos. Entre más alejado esté de lo que haces actualmente, irónicamente, mayor impacto tendrá en tu vida profesional. Aprende a tocar un instrumento musical, pinta, haz carpintería, toma clases de cocina. El contacto con otros oficios nos enseña que la vida está llena de oportunidades, de nuevos pasillos y archiveros que ni siquiera habíamos visto, y que no sabíamos que podíamos llegar a llenar. 3. Ten amigos que no coincidan en nada contigo. Todos tenemos amigos en el trabajo, en la carrera, amigos de nuestros amigos, pero después de un tiempo, el hacer amigos pareciera volverse una carga. Busca personas nuevas, aprende de ellas, pregunta de nuevo las mismas cosas, déjate sorprender con la vida de otras personas, su perspectiva, y sobre todo, el ver lo mismo que tú ves, a través de los ojos de otros. 4. Trae algo de tu niñez a tu vida adulta. El ser adulto no implica que deje atrás mi niñez, o al menos que deje de hacer las cosas que me gustaban de niño, ¿dónde dice que debo dejarlo? Nadie me envió ese memo. Eso mismo que disfrutabas de niño: jugar béisbol con tus amigos, leer cómics, jugar videojuegos, lo disfrutarás igual o más incluso de adulto. Arriésgate y saca a ese niño y deja que te acompañe durante tu vida adulta, estoy seguro hará el trayecto más interesante. 5. Siempre ríete de ti mismo. No hay nada mejor que reírte de ti mismo. Por favor, hagámoslo diario, búrlense de ustedes todos los días, si notan un defecto, si dicen algo inapropiado. Si saben que cometieron un error, háganse una broma; si se caen, levántense sonriendo, si ven a alguien caer, levántenlo riéndose con él. Addendum. Siempre pídele el teléfono a la más bonita de la fiesta. Arriésguense, no pasa nada. De todas maneras no le iban a hablar. Jamás digan que no está en nuestra liga. Manden al demonio a todos, háganlo, vayan a ese lugar, plántense enfrente y digan: “You’re the most beautiful thing I’ve ever seen” o un simple: “You had me at hello”. En verdad, ¿saben qué es lo peor que puede pasar? Que te diga que sí. En fin, espero alguno de estos consejos les sirva en su vida, aunque estoy seguro de que no lo harán.
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