La inteligencia artificial (IA) está generando múltiples oportunidades y desafíos tanto para empresas como para usuarios. Esta tecnología está provocando un cambio en la forma de pensar y trabajar, así como en las estrategias necesarias para adaptarse a nuevos entornos regidos por diferentes normativas. Una de las áreas más afectadas por esta transformación es la búsqueda y navegación online, así como la gestión del tráfico digital y el posicionamiento web, lo que obliga a las empresas a reinventarse.
De acuerdo con las predicciones de Gartner para el marketing, para 2028 las marcas experimentarán una reducción significativa del tráfico orgánico en sus sitios web, hasta un -50%, debido a la adopción por parte de los usuarios de la búsqueda online impulsada por IA. Esta reformulación de los motores de búsqueda como Google o Bing, respaldada por la IA, hará que las respuestas a las consultas se presenten directamente en la página, en lugar de ofrecer múltiples resultados que requieran hacer clic en diferentes páginas. Esta situación supondrá una disminución drástica del tráfico a las páginas web y afectará la generación de leads a través de canales de búsqueda orgánica. Ante este cambio, las empresas deben adaptarse para mantener sus resultados, explorando canales alternativos, invirtiendo en una presencia más sólida en redes sociales y considerando asociaciones estratégicas para ampliar el alcance y la personalización.
La evolución del email marketing, impulsada por la inteligencia artificial, ha permitido personalizar aún más los mensajes, realizar envíos automáticos en momentos estratégicos y adaptar el contenido a los intereses y comportamientos de cada consumidor. Esto mejora la comunicación y puede aumentar la tasa de conversión y las ventas. Además, la integración de la IA en la gestión empresarial agiliza tareas comerciales y de marketing al analizar y adaptar el mensaje según las particularidades de cada destinatario.
Según una investigación de McKinsey, más del 20% de los presupuestos digitales se están invirtiendo en tecnologías relacionadas con la IA, y el 90% de los líderes comerciales esperan utilizar soluciones de IA generativa a menudo en los próximos dos años. Sin embargo, es importante considerar los sentimientos de los consumidores hacia el uso de la IA. A medida que esta tecnología se generaliza en el marketing, algunos consumidores preferirán marcas que prioricen la autenticidad y la ética como diferenciación en un contexto cada vez más tecnológico.
Por ello, es crucial que las marcas comuniquen de manera transparente el uso de la IA, garantizando a los consumidores que se emplea para ofrecerles una experiencia personalizada. La IA nunca debe reemplazar la autenticidad humana, y el equilibrio entre eficiencia tecnológica, empatía y conexión genuina es fundamental para construir relaciones sólidas y duraderas con los consumidores.