El cineasta Adam McKay, director de «No mires arriba», crea un anuncio satírico para denunciar el papel de Chevron en el cambio climático. A través de su productora Hyperobject Industries, ha producido un spot ficticio en tono paródico que critica las acciones de la compañía energética y expone su responsabilidad en el agravamiento de la crisis climática.
El vídeo, compartido en Twitter por Adam McKay, se ha vuelto viral en los últimos días, alcanzando más de 5,4 millones de reproducciones y 32.000 retweets. El director generó intriga con la aparentemente inocente pregunta «¿Alguien ha visto este anuncio de Chevron?» sin proporcionar ninguna indicación de que se tratara de una sátira, dejando que cada espectador descubriera la naturaleza del video al reproducirlo.
Los primeros instantes del vídeo podrían hacer creer que se trata de una auténtica campaña de la compañía petrolera, ya que utiliza los códigos visuales característicos de la industria: imágenes serenas de la naturaleza y la relación humana con ella, una música relajante e inspiradora, y un texto evocador. De hecho, el spot comienza con la frase «En Chevron creemos que nada es más importante que la vida».
No obstante, a medida que avanza, el anuncio va resaltando el petróleo, la gasolina, los combustibles fósiles y los gases de efecto invernadero, revelando la profunda intención crítica de McKay. La locución explica: «Al final del día, en Chevron no nos importa una mierda ni tú, ni tus extraños hijos ni tu andrajoso perro. Tenemos millones y millones de dólares para pagar por este tiempo publicitario, este montaje cursi y esta música cutre».
De esta manera, se ridiculizan los recursos estilísticos y narrativos utilizados por la industria energética, denunciando su empleo para confundir a los espectadores y mejorar su imagen de marca. McKay asegura que estos códigos se utilizan para sumir a los consumidores en un estado catatónico que les ayude a olvidar que la empresa los está matando activamente día tras día.
«El cerebro humano solo puede procesar una determinada cantidad de información a la vez, así que estas escenas emocionalmente cargadas desviarán pensamientos como ‘Chevron me está matando'», comenta el narrador. «Es simplemente cómo funciona nuestro cerebro, tú, marioneta de carne que solo existe para proporcionarnos beneficios», concluye el anuncio, señalando que la crítica es aplicable a Exxon, BP, Shell y cualquier político o medio de comunicación corrupto que cambie el futuro de la vida en el planeta por dinero sucio y acciones petroleras.
El anuncio ha sido escrito por McKay, narrado por Steven San Miguel, editado por Bruce Hermann y producido por Staci Roberts-Steele. Adam McKay, en declaraciones a Deadline, ironiza sobre la idea detrás del anuncio paródico: «La idea de hacer este video burlándonos de cómo Chevron, al igual que todas las demás compañías petroleras, nos está matando todos los días, surgió del hecho de que Chevron y todas las demás compañías petroleras nos están matando todos los días».
Además del falso anuncio, el cineasta también compartió fotomontajes en los que renombró los huracanes y fuertes tormentas que han golpeado recientemente Estados Unidos con los nombres de compañías petroleras como Exxon, Chevron o Koch Industries.
De acuerdo con el informe de Variety, el Fondo de Emergencia Climática reveló recientemente que Adam McKay realizó una donación de 4 millones de dólares a la organización. Esta donación no solo representa su contribución personal más alta en cualquier causa, sino que también se convierte en la donación personal más grande en la historia del Climate Emergency Fund. Además, el cineasta se ha unido a la junta directiva de la organización.
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