Frente a las crisis financieras que han azotado al país en los últimos años, cada vez es más la preocupación -de los estudiantes que están por egresar y de los profesionistas- por el riesgo de no poder encontrar trabajo, ya que la competencia en el mercado laboral cada vez es más agresiva. Cuando una empresa lanza una vacante lo que está pidiendo es el perfil ideal de una persona, así como también busca cubrir una necesidad que se tiene dentro de la compañía, por ejemplo: un investigador que analice los mercados y las tendencias; un coordinador que lleve todos los asuntos relacionados con la mercadotecnia de la empresa; un gerente que sepa negociar con proveedores y haga compras estratégicas, entre muchos puestos más. Es aquí donde sabemos si se está calificado para aplicar al puesto o no, si la respuesta es no, es mejor esperar a encontrar la vacante ideal para el candidato ideal. La primera entrada al proceso de selección indiscutiblemente es la presentación del Curriculum Vitae (CV), en el cual se debe exponer la experiencia acorde al puesto solicitado y no exagerar en las actividades realizadas; los especialistas recomiendan una hoja (máximo dos) en donde se explique perfectamente los logros y experiencia, generando impacto en el reclutador. El consejo es que si se tienen proyectos que no encajan en la vacante no se deben poner, pues sólo se generará paja y el CV terminará en la basura. El segundo paso es para muchos algo más difícil, la entrevista de trabajo, en la cual para tener éxito es recomendable investigar acerca de la empresa, llegar con propuestas de valor que apoyen a la compañía y logren alcanzar los objetivos, así como ser claros de los beneficios que tendrá la empresa cuando el candidato sea parte de ésta; aunado a esto también es de vital importancia ir debidamente vestidos al momento de la entrevista; recuerda, no hay una segunda oportunidad para causar una buena impresión. Finalmente, los especialistas en Marketing Personal y Recursos Humanos comentan que está prohibido asistir a una entrevista de trabajo sin una estrategia previa, se debe conocer perfectamente la empresa, su giro, sus fortalezas, debilidades, competencia y todo lo que sea necesario para poder generar estrategias efectivas, así como ser claros en los beneficios que la compañía tendrá al momento de la contratación. No se trata de ir a pedir, al contrario, el reclutador debe palpar el interés de aportar a la empresa por parte del candidato. Imagen cortesía de iStock
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