Son tantos los roles que manejamos las mujeres, que a veces nos perdemos en la inmensidad, pensando, ¿esto es lo que de verdad queremos ser?
Entremos en el terreno de las MADRES del mundo creativo. Somos tan creativas, que armamos tremendas peripecias para lograr, cosentir, apapachar a nuestros hij@s.
El conteo diario del reloj es algo así como una rutina, recuerdo la película el Día de la Marmota, donde siempre pasa lo mismo. Todo de prisa, que no nos damos cuenta cuando es de noche y de repente, es de día y así sucesivamente.
Una vez un coach muy querido me dijo: “Pero, porque hablas tan rápido, te la pasas corriendo“ y como diría mi abuela “No vas a ir a cobrar herencia”.
El stress se convierte en el desayuno, comida y cena diaria, entonces porque no DARNOS UNA PAUSA.
Disfrutemos de la vida, de los besos, de los hij@s, del abrazo del OSO, de caminar sin pisar las rayitas de la calle, comer helado y hablar de tontería y media.
En vez de contraernos por el stress, mejor vamos a expandirnos permitirnos que nos llegue lo mejor de la vida.
Primero querernos a nosotras mismas, cambiemos el TOUR de Carritos Chocones en el que nos encontramos y empecemos un TOUR GALÁCTICO, que nos lleve a sentir cosas que ni siquiera nos hemos dado cuenta. Esa es la PAUSA, que puede durar unas micras de segundo, porque aquí lo que importa no es el tiempo sino lo que sientes.
Las madres creativas, somos tan creativas que podemos llevar a nuestros hij@s a lugares que jamás imaginaron, podemos hacer la mejor campaña publicitaria para que cada día nuestros hij@s puedan imaginar grandes historias y fantasías a través de nuestras vivencias.
No perdamos la niña creativa que llevamos dentro.
Tengo la certeza que unos segundos de imaginación, amor y aventura valen más que los sándwiches que preparamos todos los días. Feliz 10 de mayo.
Autora:
Claudia “La Claus” González – Cofounder/ Managing Director Gate Films México
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