Diciembre, 2024.- Con la llegada del próximo año, una nueva generación está a punto de hacer historia: la Generación Beta. Nacidos entre 2025 y 2039, estos bebés no solo serán los testigos del cambio de era tecnológica, sino que también se espera que vivan para ver el siglo XXII. Según estimaciones, para 2035 representarán el 16% de la población mundial, consolidando su impacto global.
Hijos de la tecnología y la diversidad
La Generación Beta será formada por los hijos de los últimos Millennials y la Generación Z, quienes ya crecieron en un mundo hiperconectado. Sin embargo, los Beta Baby llegarán en un contexto donde la Inteligencia Artificial (IA) y la Realidad Aumentada (AR) alcanzarán su auge, lo que les dará una preparación tecnológica superior incluso a la Gen Alpha.
Un perfil único: curiosidad, inclusión y adaptabilidad
De acuerdo con un estudio de McCrindle, la Generación Beta promete ser aún más curiosa, inclusiva y adaptable que sus predecesoras, las Generaciones Z y Alpha. Esta nueva cohorte buscará un equilibrio entre la hiperconectividad digital y la expresión personal, combinando relaciones presenciales con comunidades digitales globales.

En este sentido, los Beta podrían redefinir conceptos como pertenencia y comunidad, integrando la diversidad y la colaboración global como valores fundamentales de su identidad.
Un repaso a las generaciones
Para entender su lugar en la historia, recordemos las generaciones previas:
- Baby Boomers (1946-1964): La generación del crecimiento económico y el inicio de la globalización.
- Generación X (1965-1980): Marcada por la transición tecnológica y los inicios del internet.
- Millennials (1981-1996): Testigos del nacimiento de la era digital y las redes sociales.
- Generación Z (1997-2012): Nativos digitales que crecieron en un mundo conectado.
- Gen Alpha (2013-2024): La primera generación completamente inmersa en tecnologías emergentes como la IA y la AR.
Un vistazo al futuro
A medida que nos acercamos al 2025, la Generación Beta no solo representará el futuro, sino también un puente hacia el siglo XXII. Su capacidad para combinar tecnología avanzada con valores como la inclusión y la adaptabilidad marcará un nuevo capítulo en la historia de la humanidad.
Comentarios