Google se ha visto obligado a disculparse después de que una cláusula en su programa #TeamPixel generara un escándalo entre influencers y creadores de contenido. La polémica surgió cuando se reveló que el formulario de registro para recibir el nuevo Pixel 9 exigía que los influencers promovieran este dispositivo «por encima de cualquier otro teléfono», o de lo contrario, su relación con Google se vería terminada.
La filtración de esta cláusula provocó una ola de críticas en plataformas como Threads, donde se mostró parte del documento que claramente establecía la obligación de priorizar el hardware de Google sobre cualquier dispositivo de la competencia. Esta condición fue vista como una imposición poco ética, lo que llevó a Google a retroceder y eliminar la controvertida cláusula.
Google aclaró la situación afirmando que el objetivo de #TeamPixel es simplemente poner los dispositivos en manos de creadores de contenido, y no en las de la prensa o revisores de tecnología. Sin embargo, la compañía admitió que el lenguaje utilizado en el formulario era inapropiado y que, al ser señalado, fue eliminado.
La relación entre grandes empresas tecnológicas e influencers siempre ha sido complicada, y este incidente pone de relieve las tensiones inherentes a estos acuerdos. Aunque Google ha eliminado la cláusula del formulario, queda la duda de si las exigencias persistirán de manera no formal.
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