Hace dos años, las marcas de moda y lujo se lanzaron en masa al metaverso. Sin embargo, dos años después, la revolución que se esperaba no ha llegado. La población del metaverso sigue siendo reducida, el valor de los NFT y los bienes de consumo virtuales rozan sus cifras más bajas, y la confianza de agentes e inversores se resiente.
¿Qué pasó?
Para entenderlo, primero hay que entender qué es el metaverso. Una ingeniera especialista en inteligencia artificial lo define así:
«El metaverso es la evolución del Internet 2D al 3D. En vez de buscar productos como si fuera un catálogo en una web para hacer compras online, nos estaríamos paseando desde el sofá de casa por una tienda virtual tal cual lo haríamos en la tienda física, representados por un avatar».
«Un avatar es un personaje 3D como los de los videojuegos que manejamos nosotros y que nos representa en el mundo virtual, dándonos una identidad y una presencia ‘corpórea’ para interactuar con esos mundos 3D».
La idea era que las marcas de moda pudieran crear colecciones virtuales, tiendas insignia y experiencias en el metaverso. Algunas marcas de lujo, como Balenciaga, Dolce & Gabbana o Karl Lagerfeld, fueron de las primeras en lanzarse a esta aventura. Pero pronto se les sumaron cadenas comerciales como Zara y H&M.
¿Por qué no ha funcionado?
Hay varias razones. Una de ellas es la complejidad técnica del metaverso. No es fácil crear y mantener una experiencia virtual atractiva y fluida.
Otra razón es la falta de comprensión de cómo integrar el metaverso en las estrategias empresariales. Muchas marcas no han visto el retorno de inversión claro que esperaban.
Además, los costes asociados con la implementación del metaverso son elevados. Esto ha hecho que muchas empresas se decanten por otras prioridades.
¿El metaverso está muerto?
No necesariamente. Hay algunas empresas, como Apple, Microsoft o Telefónica, que siguen apostando por el metaverso. Además, hay un gran número de startups y PYMES que están desarrollando tecnologías innovadoras para el metaverso.
Sin embargo, es probable que el metaverso siga siendo un nicho durante algún tiempo. La adopción masiva aún está lejos.
¿La moda virtual tiene futuro?
Es difícil decir. Dependerá de cómo evolucione el metaverso y de cómo las marcas de moda sean capaces de adaptar sus estrategias a este nuevo entorno.
En cualquier caso, la moda virtual ya ha demostrado que es una posibilidad real. Las marcas que quieran estar preparadas para el futuro deben empezar a explorar esta nueva frontera.
¿Qué opinas? ¿Crees que la moda en el metaverso tiene futuro?