Desde hace varios años me dedico al marketing digital. He tenido la oportunidad de conocer y conversar con diferentes dueños de negocio que han tenido experiencias de todo tipo en cuanto a marketing digital se refiere. Lejos de ser presuntuoso, te cuento esto porque he detectado algo que me ha hecho detenerme a lanzar la siguiente aclaración:
Ningún interno, freelancer o agencia de marketing digital va a ayudarte a lograr tus metas como negocio.
En en serio, es algo que se cumple casi en su totalidad si tú consideras que estás dentro de este perfil:
Eres dueño de un negocio que busca crecer; las constantes actividades que tienes a tu cargo te han hecho delegar a alguien la tarea de promocionar un negocio que -probablemente- no has terminado de entender, a un público que -seguramente- no tienes identificado y para alcanzar una meta de ventas que -presumiblemente- salió de una corazonada o que no responde a una métrica real, sino que se basa en sólo “vender más”, “llegar a más” o “ser más atractivo”.
¿Te suena familiar? Aunque no lo creas, es más común de lo que parece y, desafortunadamente, nos enfrentamos a ello todos los días. Y, ¿cómo es que me envalentono a asegurar que nadie puede ayudarle a este tipo de negocios? Sencillo: no puedes ayudar a alguien que no tiene claro lo que implica su negocio.
Toda estrategia de marketing parte de 3 sencillos temas: tu negocio, tus clientes y tus objetivos. Podrá haber muchas aristas alrededor de ellos, pero estos 3 elementos son esenciales para una buena construcción de un plan:
- Tu negocio: No sólo es saber el nombre ni conocer los productos a nivel técnico. Se refiere a entender el sector en el que la gente lo identifica más, las razón principal que lo diferencía de la competencia y las razones por las que la gente hoy compra sus productos o servicios; las competencias directas e indirectas, así como aquellos líderes del sector.
- Tus clientes: Nada es tan importante como tu cliente en la construcción de una estrategia. Ellos son quienes dictan qué decir, cómo decirlo, qué es atractivo y que no. Pensar que un producto es bueno porque lo conoces no implica forzosamente que tu cliente lo vea con los mismos ojos. Piénsalo así: ¿habrá alguna taquería que no diga que son los mejores tacos del lugar? ¿Quién determina eso? DIce una frase coloquial que “nadie vende pan frío”, por lo que entender a tus clientes te ayudará a establecer que sí es de valor para ellos y por qué están dispuestos a comprar tus productos o servicios.
- Tus objetivos: No todos los objetivos tienen la misma relevancia, no todos se pueden medir igual y no todos representan un resultado tangible, Es un tremendo conflicto pedirle a un experto que te ayude a aumentar la presencia de tu marca y que al final lo midas por cuantas ventas lograste cerrar. Establecer los objetivos desde un inicio te ayudará a tí (y a ellos) a establecer un plan de acción más adecuado y un enfoque más claro.
Si logras tener en cuenta estos elementos, te aseguro que para cualquier profesional de marketing digital será mucho más sencillo poderte ayudar, además de que te permitirá tener una idea más clara del rendimiento o la efectividad que tengan los contenidos que se trabajen en los diferentes canales digitales que estés utilizando (orgánicos y pagados).
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