Pues si. Empecé a verla y difícil parar. No voy a entrar aquí a detallar lo que me enganchó a mirar todos los capítulos en un par de tardes (me lo tomé con calma, tampoco hay que exagerar). Lo que me interesa comentar con ustedes aquí, es la construcción del storytelling de esta serie y pensar hasta qué punto está al menos intentando, con una evidente decisión de criterio narrativo, incluir los cambios culturales que hemos estado enfrentando en la sociedad en las últimas décadas. Al ver toda la primera temporada, da la sensación de que se tuvo especial cuidado en incluir, con creatividad y respeto en mi criterio personal, muchos (si no es que todos) de los temas que construyen un pensamiento basado en la diversidad – paradigma que además apoyo y valoro en lo personal. Haciendo un repaso, no absolutamente exhaustivo, vemos varias manifestaciones de la comunidad LGBTQQ (no cuento mucho para evitar el spoiler) además de situaciones humanas imperfectas y difíciles que con base a un juicio estrecho o estricto, podrían calificarse de inmorales. Todos y cada uno de los aspectos de la inclusión y la diversidad estén entretejidos en la historia, de forma tal que se gesta, no sin cierta dificultad, un panorama de normalidad que se siente refrescante – más allá de que seguramente es una excelente estrategia comercial que invita a la curiosidad para ver qué más puede pasar. No se niegan ni borran del mapa los miedos y estereotipos que en este caso vemos en México y me atrevo decir en toda Iberoamérica, eso sería un poco irreal. Pero el guión intenta mostrar un proceso en el cual hay sorpresa, a veces rechazo inicial y finalmente un intento de aceptación y respeto. No quiero sugerir que historias como estas son capaces por ahora de cambiar a la sociedad. Ni mucho menos Más bien me llama la atención verla como un posible espejo de lo que nos está pasando. ¿Podría ser una posible invitación a mirar nuestras creencias y a cuestionarnos cómo cada uno de nosotros puede evaluar sus propios prejuicios y miedos? La diversidad nos enriquece, nos reta a crecer como seres humanos y también como sugiere la serie, también nos puede invitar a la diversión. Hablando de eso, quizás una de las tendencias más divertidas hasta ahora ha sido el #PaulinaDeLaMoraChallenge – ¿Un ejercicio de inclusión o de ridiculización de este peculiar personaje? Está por verse. Me gustaría más que sea lo primero.
Ay sí, mucha risa con el #PaulinaDeLaMoraChallenge síganle. Los estoy observando. pic.twitter.com/Y0WZlrPU89
— La casa de las flores (@CasaFloresTV) 14 de agosto de 2018
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