Cuando las personas tienen una mala relación de pareja pueden sufrir una dependencia de o hacia la otra persona, ésta puede ser emocional y aún cuando tiene conciencia de ello, es difícil hacer algo al respecto, principalmente por la incapacidad de enfrentar la situación, desacomodarse y dejar los aspectos a los que está acostumbrado (alejarse del pantano). Algunas posibles acciones pueden ser:
Aceptar y concienciar El primer gran paso es aclarar para sí mismo en qué punto está la relación: ‘se hizo todo para que la relación funcione pero aun así se extingue’, ‘¿la relación no funciona porque uno o los dos no se compromete?’, ‘¿puede funcionar si pongo o ponemos de nuestra parte?’, ‘¿no funciona porque llegó o reapareció alguien en mi o su vida?’… Luego acepte la situación tal como es (no está mal llorar o gritar en algún lugar donde nadie te vea para no sentirte más vulnerable)
Defina qué le gustaría hacer y qué es lo mejor para usted Un punto de partida es entender a futuro qué le gustaría en el tiempo (largo o mediano plazo) luego, haga algunos puntos que le permitirán llegar a su meta, son como las paradas en el camino hacia su nueva situación. Es decir, usted está tomando el control de su vida.
Si usted llega a sentir que no puede lograrlo y que va a recaer, es tiempo de buscar apoyo profesional un coaching profesional psicólogo (este profesional es obligatorio ya que si cae en un estado depresivo requiere apoyo profesional)
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