Ya poco importa por quién haya votado usted el pasado 1 de Julio. Lo que es un hecho es que a partir de ahora, todos juntos tenemos que escribir una nueva narrativa. A mi me gusta observar todos los fenómenos y sucesos del país, como cuentos, novelas e historias. Así que desde mi interpretación, el pasado 1 de julio se desarticularon muchos elementos que conforman México y hay que volver a ponerlos juntos para contar una nueva historia. Pero, ¿Qué es lo que hace a un país? ¿Qué elementos se necesitan para crear una nación? Una bandera, un himno, un gobierno, fronteras determinadas, ciudadanos, un mercado, etc. Una nación es mucho más que unas coordenadas en un mapa y un montón de instituciones. Un país es una identidad y una pertenencia, es algo que defender y del cual sentirte orgulloso. Es ser testigo en silencio del himno nacional en un día festivo, es el rugir de una afición en un partido de futbol*. Esas cosas vibran cuando una nación yace en nuestros corazones. Y muchas veces estos sentimientos no los define el lugar en el que naciste, la religión que profesas ni el idioma que hablas. Un país es un ancla donde tus raíces te sirven de soporte emocional y nostálgico. Pero sobre todo, parafraseando al filósofo Ortega y Gasset, una nación no sólo es lo que hemos sido, sino lo que anhelamos ser. ¿En qué momento un país tienen que tomar un respiro y volver a reinventarse? ¿Estamos en un problema económico o filosófico? La verdad es que no lo sé porque no soy experto en economía ni en políticas públicas, pero estoy seguro que no todos los mexicanos nos estremecemos igual con el himno, no todos nos sentimos igual de afortunados con nuestra cultura ni para todos México is the shit. En la media que en haya un sentido comunitario y solidario entre todos los habitantes podremos construir una narrativa en la que todos estemos incluidos. Un país, como una familia, debe protegerte, inspirarte y ser un espacio de pertenencia. Hacerte vibrar. Pero le tengo una pregunta al lector En un país con una narrativa inclusiva: ¿Un habitante de la Sierra Tarahumara debería de sentirse igual de orgulloso por el país que yo que vivo en la Ciudad de México? ¿El corazón de un Tabasqueño debería de vibrar igual que el de un ciudadano de la Frontera Norte? ¿Qué opina usted? Cita: * How to Make a Nation/Monocle Otto Poncelis Head of Strategy & Storytelling en S,C,P,F México. Es diseñador de narrativas y consultor de negocios. También es profesor en diferentes universidades de México.
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