Instagram conquistó a los usuarios de todas las edades con sus fotografías y videos. Pero la competencia se ha vuelto feroz por las imágenes más espectaculares y los feeds mejor curados.
Tanta perfección empieza a cansar y a los usuarios, como ocurrió antes con la televisión, lo que les gusta es la realidad.
Entonces Instagram, con 1,000 millones de usuarios, tomó sus ideas de Snapchat – que había sabido dar esa dosis de realidad a millenials y adolescentes- , se pasó al video vertical, los filtros, emoticones, y se montó los InstaStories, un baño de realidad para todos.
El éxito ha sido más que rotundo: más de 300 millones de usuarios (Según Statista) de los Stories han demostrados que estos están súper enganchados con esta herramienta que correctamente usada es una gran aliada para el marketing con influencers.
Según datos de Instagram, más del 80% de las cuentas en su plataforma siguen a una marca o un negocio, mientras que 200 millones de usuarios visitan activamente el perfil de una marca todos los días.
Además según la misma red social, los Stories han ayudado a aumentar la cantidad de tiempo que las personas pasan en Instagram: los menores de 25 años más de 32 minutos al día, en promedio, mientras que los mayores de 25, más de 24 minutos al día.
Con estos datos alentadores, las marcas deberían considerar para sus campañas con influencers incluir Stories y aprovechar una oportunidad única para llegar a los usuarios de una manera orgánica pero, sobre todo, divertida.
A continuación, algunos puntos clave a tener en cuenta:
La credibilidad lo es todo
Como ya hemos dicho antes, para una marca no basta con tener a una celebridad como figura principal de sus anuncios o un influencer con miles o millones de seguidores, lo importante es que éste conecte con ese público objetivo al que quiere llegar y la clave está en cuán verosímil resulta ese mensaje.
En general, nos sentimos más identificados con alguien que es como nosotros (el 85% de los usuarios cree más en las recomendaciones de amigos que en las de la publicidad) y creemos más en su opinión que en la de alguien que está lejos de nuestra realidad. Por eso es importante que una marca se asocie con influencers que sean afines a los valores de su marca y que ayuden a distribuir su mensaje de una forma que suene natural, no forzada. Para eso están los Stories.
Hacer trabajar el feed y los Stories juntos
La belleza de usar IG para las campañas de marketing digital con influencers es que la plataforma se retroalimenta entre el feed y los Stories.
Lo cierto es que cuando una marca utiliza un influencer, el feed sirve para contar lo que se puede extender en los Stories y viceversa, hacer un llamado desde los stories a un post.
Según Instagram, el 39% de los usuarios se interesó más en una marca o producto después de verlo en los Stories. Parece que aunque las personas asocian fuertemente el descubrimiento de marcas y productos con el feed, también aprecian que se pueda ver contenido relacionado con la marca en Stories, por eso es clave hacer trabajar a ambos a la vez.
Como sabemos, toda plataforma trabaja con algoritmos que son los que determinan lo que los usuarios ven. Usar el feed y los Stories juntos no hacen más que impulsar el algoritmo al crear más interacción con el público objetivo.
Cercanía en vivo
Además de la credibilidad, las redes sociales son cercanía y los Stories promueven la conversación. Con la función de Live Streaming se pueden organizar sesiones con influencers de preguntas y respuestas, transmitir eventos o dar conferencias que ahora darán un paso más con la recientemente estrenada función de IGTV. Otra valiosa herramienta es la de la encuesta en vivo para conocer la opinión de la audiencia a través de un sticker interactivo con resultados en tiempo real.
Todas estas funciones se pueden hacer más cercanas y divertidas si además se trabaja con influencers que ya tienen ganado su poder de prescripción sobre los seguidores.
Influencer take over
Los Stories son una oportunidad para las marcas para contar su historia. Utilizada como una herramienta de storytelling les da un oportunidad para construir una narrativa que permita a la audiencia conocer mejor la marca. Todo esto combinado con el discurso de un influencer que comparte sus valores y público objetivo es una potente arma para consolidar esa narrativa.
Pero si además utilizamos la estrategia de dejar que el influencer “tome” la cuenta de Instagram de la marca y por un tiempo determinado sea quien suba posts o haga Stories podemos potenciar los mensajes con un contenido de valor que el influencer puede aportar.
Automatizar las campañas
Una campaña en Instagram se puede montar manualmente eligiendo uno a uno los influencers o se puede recurrir a una plataforma automatizada. La ventaja de estas últimas es que ofrecen rapidez y sencillez para elegir a los influencers idóneos para las campañas. Además cuentan con herramientas de segmentación y proporcionan datos reales de impresiones y número de clics.
Con una campaña con varios influencers a la vez, a través de estas plataformas se puede lograr que el mensaje de la marca consiga mayor visibilidad e incluso tráfico de calidad mediante los enlaces en perfiles que tengan más de 10.000 seguidores, lo que ha llevado a otro nivel las compras que se inician en la plataforma de Instagram.
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