Las cosas nuevas siempre nos causan nervios, es algo totalmente normal. Eso sucede también cuando ofrecemos un servicio y debemos enfrentar nuestra primera reunión con un cliente, venderle el servicio y convencerlo de que lo que ofrecemos es bueno pero con un poco de temor de no saber si lo estamos haciendo bien, la primera vez con un cliente es la más difícil pero luego de esa primera vez, todo fluye.
Te daré hoy algunos consejos para que esa primera vez no sea nada traumática y termines la reunión con las probabilidades a tu favor.
- Organización: tener un desorden nunca da buena impresión y esto se aplica para cualquier ámbito de tu vida, en la profesional es sumamente importante mantener un orden en: las cosas que hacer, las nuevas asignaciones y tener a la mano todo para el desarrollo de la reunión. Es necesario que establezcas que material de apoyo usarás, un borrador de lo que dirás para que no se te olvide nada y información general de la empresa o cliente.
- Manejar el tema: tal vez sea muy tonto o sea muy obvio este consejo pero es necesario que manejes el tema, que sepas todo o por lo menos el 90% del servicio que vas a ofrecer, te lo debes y al cliente, a ti para demostrarte que eres responsable por lo que sabes y dices, y al cliente porque es un servicio que necesita y que pagará por él. Si es algo que sabes solo lee un poco un día o horas antes, solo para refrescar, lo demás es desenvolverte en la reunión.
- Confianza y estilo: estar organizado y saber, no te garantizan el éxito con el cliente, lo más importante es tener confianza e imponer tu estilo al momento de hablar del tema. Decir las cosas con base agregándole tu personalidad es la combinación ideal para lograr lo que se quiere.
Por mucho que se planifique la primera vez con un cliente como en muchas otras situaciones puede ser impredecible, pero lo importante es que siempre te mantengas a la altura de cualquier eventualidad y puedas concretar el servicio.
La mejor sensación es, sin duda, al final, que sales sabiendo que lo hiciste bien y diste lo mejor de ti sin importar la compra o no del servicio. Sabes que eso te servirá de experiencia y que seguir mejorando es el objetivo.
Realmente espero que su primera vez con un cliente les vaya de lo mejor.
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