La tecnología ha irrumpido en todos los ámbitos del conocimiento y no hay industria que no se haya visto sacudida por su potente impacto.
Los recursos humanos no son la excepción. Actualmente, sus prácticas han cambiado considerablemente respecto a los pasados 5 o 10 años y, como no, la tecnología tiene mucho que ver en esto.
No voy a ahondar en los conceptos de recursos humanos que no es mi área de experiencia, sino de cómo esta industria se puede beneficiar de las redes sociales, los influencers y las plataformas, que es lo mío.
Las redes sociales nos han dejado varias lecciones en el rápido camino de su evolución y una de ellas es que las personas son seres sociales que se sienten naturalmente atraídas por pertenecer a algo más grande que sus propias existencias.
Como usuarias de redes sociales, las personas cuentan entre sus más genuinos intereses el formar parte de una comunidad que comparte sus valores, por eso, las redes sociales han sido el ambiente perfecto para el nacimiento de los influencers que en el espacio digital han sabido dar voz a millones que identifican intereses comunes.
Se pueden encontrar las voces influyentes en las redes sociales entre los usuarios comunes que gracias a su nivel de influencia en su círculo cercano, tienen un gran poder de prescripción, al final, como usuarios, todos somos influencers. Si esto lo trasladamos a las empresas, qué mejor forma de promover el sentido de pertenencia que partir de los mismos empleados, los influencers que conocen mejor la empresa desde dentro y de modo voluntario quieren compartir su orgullo de pertenencia y su pasión por su empresa. A esto se le conoce como employee advocacy, una tendencia en recursos humanos que busca que los empleados transmitan su cultura y valores de marca a través de sus cuentas personales en las redes sociales.
Con la fuerte disminución de lo números en cuanto al alcance orgánico en las redes sociales y el aumento en el volumen de contenido disponible, la carrera para llamar la atención de los usuarios es más competitiva que nunca y los empleados se han convertido en activos clave como embajadores confiables de la marca de medios sociales para sus empresas.
Actualmente, experimentamos entornos laborales casi completamente digitalizados por lo que es bastante beneficioso para la empresa ofrecer a los empleados una experiencia digital parecida a la que tienen como consumidores con plataformas y herramientas tanto para la comunicación como para la promoción de sus empresas en las redes sociales.
Recordemos que los empleados de hoy, especialmente los millenials, quieren encontrar un sentido más allá de sus trabajos y muchas veces el sentido de pertenencia a un cultura corporativa puede ser tan o más importante que el salario.
Los empleados de hoy quieren asegurarse de que sus necesidades y valores sean consistentes con la cultura laboral más amplia. Vivimos en la era del empleado que es también un consumidor y a la vez un prescriptor, tiene una voz que quiere expresar y una audiencia, por mínima que parezca, que le escucha.
Si la cultura laboral conecta a las personas con un propósito es más fácil contar con empleados más comprometidos que encuentra en sus empresas no sólo un ambiente de trabajo favorable, sino también las herramientas y tecnologías que permiten compartir con otros su orgullo de pertenecer a una empresa afín a sus intereses.
Discussion about this post