Como yo lo veo, en la publicidad hay más personas hablando de la importancia de los cambios que gente cambiándola. Es así, sobran los discursos y faltan hechos. La agenda actual de cualquier festival publicitario tiene por lo menos dos conferencias que hablan de cómo las cosas ya no son como antes y es interesante cómo la creatividad se emplea más para redactar y definir teorías de estas transformaciones que en ideas de ejemplos concretos de cómo se ha aportado. No digo que el cambio no sea cierto, hay transformaciones en la publicidad, en la sociedad, en el mercado, en las tendencias, en todo. Pero apenas pocos exponentes de nuestra industria dejan que sea su trabajo el que hable de cómo se afrontan estas variables y cómo se reestructura el talento y negocio para fortalecer la industria y hacer mejor las cosas. Un ejemplo es esta campaña de alguien convencido de que debemos hacer trabajo por el que la gente desee pagar por ver. Lo demás, parece una oleada de indiferencia por un lado y buenas intenciones por otro. Debo reconocer que hay intentos interesantes, se comparten conocimientos, se proponen iniciativas, pero algunas se quedan en el aire. Se crean grupos de Whatsapp de gente involucrada para dar propuestas, pero generan pocos resultados y acaban siendo solo un club de amigos. Lo dicho, se trata, pero poco se consigue. Todos tenemos nuestro lugar en esta industria y tratamos de compartir nuestra filosofía, y en cierto modo, nuestra forma de cambiar las cosas en el corto espacio en el que tenemos influencia. En lo personal, intento que los nuevos talentos salgan de las universidades sabiendo cómo es la industria que van a enfrentar, cómo podrían devolverle valor y que entiendan los desafíos que tiene actualmente la publicidad. Hago un esfuerzo en compartir mi pasión por contar ideas, porque es algo que me levanta a diario. Porque pienso que los cambios necesarios están en cada uno de nosotros para empezar a contagiarlos. Dejar de lado el ego, la charlatanería y necesidad de protagonismo para encontrar ese lugar, por más pequeño que sea, donde podamos salvar a nuestra apasionante industria tan vulnerada, a veces menospreciada y muchas otras, aprovechada por un puñado que no quieren cambiar absolutamente nada. Xavier Prado Redactor en agencia y entusiasta en las aulas. Fanático de aprender, viajar y cocinar. Me apasiona tanto la publicidad que todavía creo que podemos devolverle su valor, sobre todo con los futuros profesionales. Director Creativo Asociado en McCann Quito y profesor de Redacción Publicitaria en la Universidad de las Américas. Twitter: @XaviPrado www.linkedin.com/in/xaviprado
Comentarios