Lo sé, si hablamos de trabajo de agencia de publicidad es imposible no aprender, desde el trabajo del día a día, la problemática de clientes y hasta la gente con la que trabajas resultan ser una escuela. A veces, escuela de lo que no se debe hacer. Sin embargo, no podemos negar que en unas agencias aprendes más que en otras. Hoy en día, ¿qué son las “agencias escuela” y por qué es importante serlo? Durante años y en muchos mercados, han habido agencias que llegaron a darse a conocer también como escuelas. Actualmente leemos artículos y noticias de grandes líderes de la industria que podrían coincidir haberse formado en agencias y redes, y hoy, ya lideran sus propios proyectos. Estas personas que vienen a ser los nuevos referentes de la publicidad conocen la importancia de estos procesos y cuánto han aportado en sus carreras y en sus negocios.
Una agencia escuela es un lugar que tiene clara y comparte su filosofía, metodología de trabajo y fija metas claras. Es un lugar que se nutre con la actitud de su gente y sabe cómo sacar provecho de su talento. Para ello, estas agencias requieren líderes que tengan un enfoque adecuado del negocio de la agencia, que den importancia al crecimiento profesional de su equipo, dediquen tiempo para hablar con quienes empiezan y contagien su espíritu con quienes trabajan.
No es fácil ser una agencia escuela, pero vale la pena. No se trata de invertir en capacitaciones o cursos, es más, a veces ni siquiera son necesarios. En lo personal he aprendido mucho con simples conversaciones, con una filosofía y proceso de trabajo humano y transparente. Ha sido suficiente un trato cercano con quienes encabezan los equipos para entender y aplicar su manera de trabajar, para alimentar el criterio y para perseguir los mismos objetivos. Ser una agencia escuela hace que los chicos quieran trabajar en ese lugar, hace que la gente se sienta comprometida con los resultados y cuide a tus clientes. Puede ser muy rentable en términos de negocio y excelente para las relaciones públicas. Además, y lo más importante; nutre el mercado de gente talentosa y agradecida. Porque no hay nada peor para una industria que la gente que se va de una empresa guardándole rencor. Lamentablemente, ya no vienen a ser muchas las agencias escuela y no necesariamente por que no se establezca una determinada estructura o por condiciones cambiantes de la publicidad. Lo que nos está faltando puede ser actitud y ganas. Entendamos que en una industria de criterios necesitamos compartirlos, aprendamos de los chicos que llegan como becarios porque hay cultura de calle que hemos dejado de mirar, destinemos unos cuantos minutos a compartir nuestras experiencias con nuestro equipo y tomémonos un café de vez en cuando con alguien a quien admiras de la industria para preguntarle su opinión sobre cualquier tontería, eso a mí me ha enseñado mucho. Al fin y al cabo, no lo sabemos todo y la única herencia que podríamos dejar a los futuros profesionales, será todo eso que hemos ido asimilando en esta apasionante actividad muchas veces tan divertida, y otras tantas tan ingrata. Dedicado a mi agencia escuela, y a los amigos con quienes hasta hoy sigo aprendiendo. Xavier Prado Redactor en agencia y entusiasta en las aulas. Fanático de aprender, viajar y cocinar. Me apasiona tanto la publicidad que todavía creo que podemos devolverle su valor, sobre todo con los futuros profesionales. Director Creativo Asociado en McCann Quito y profesor de Redacción Publicitaria en la Universidad de las Américas. Twitter: @XaviPrado
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