La mayoría de jefes de Talento Humano en Ecuador, y de la mayoría de países de América del Sur donde he visto realidades similares, dominan temas de nómina: manejan una liquidación, saben cómo despedir a alguien sin pagar indemnización, cómo no pagar horas extras, qué tipo de contratos ahorrarán tres, cuatro o cinco centavos, etcétera; pero si hablamos de otros subsistemas de personas, de compromiso y cómo generarlo, de integración, consolidación, participación y apoyo a las distintas áreas de la empresa o sobre los parámetros que generan el éxito empresarial, estos mismos personajes generalmente reprueban. Las empresas están formadas por humanos, seres con vida propia, con un inconsciente propio y uno colectivo que nos integran a una sociedad en procesos culturales mucho más fuertes y profundos de lo que se puede entender a simple vista o desde la superficialidad. Entender al Talento desde la realidad organizacional nos permite generar resultados empresariales en menor tiempo y con mejores resultados de los que están en las proyecciones del plan estratégico, Balanced Scorecard o cualquier herramienta que la organización utilice. La ignorancia sobre todos los subsistemas ha generado un tabú en los departamentos de Talento Humano, creer que nómina (procesos total y únicamente contable) es la única o la mejor herramienta de este departamento para posicionarse en las empresas solo distorsiona el VERDADERO SER de esta área, una cosas son manejar políticas salariales, estructuras salariales que si son parte de Talento Humano y otra es el manejo contable de la nómina. Si la esencia de estos departamentos es un proceso que lo puede reemplazar con toda facilidad otra área, entonces está destinado a la extinción, ¿usted profesional de Talento Humano es de la escuela en pos de extinción o aporta con herramientas reales al crecimiento organizacional? Imagen cortesía de Shutterstock
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