En Latinoamérica se ha puesto de moda una palabra que cada día tiene un significado más notorio y complejo a la vez: Crisis. Esta palabra esta siendo utilizada por todas las industrias, y no tendencia sino más bien por que es una realidad. La comunicación por ejemplo esta viviendo uno de los capítulos más evolutivos y disruptivos de la historia. Esto gracias al nuevo servicio básico de consumo, el internet. Es imposible negar que la crisis económica, se siente en todo el mundo. En algunos países más que en otros, haciendo de esto una realidad palpable. Con esto se ha visto afectada la demanda laboral y en comunicación no ha sido la excepción. Obtener un titulo profesional universitario no te asegura conseguir un empleo, así también sucede con maestrías, especializaciones o cuanto nivel de formación se presente como una oportunidad. En un evento de formación profesional escuche la siguiente frase: “Nos prepararon para ser freelencers, no para ser gerentes de marca” una realidad que retumba los oídos de los que aun no nos hemos atrevido a romper el molde del empleo tradicional. Volviendo al punto, las crisis son las mejores oportunidades para generar riqueza y evolución mercantil. Con grandes herramientas tecnológicas, de investigación, preparación profesional y creatividad, es innegable que la comunicación y este evolucionando al igual que la forma de comunicar. Trabajar para una empresa ya no será una meta, sino será el proceso previo al emprendimiento. Ser empleado, tener horarios, un sueldo pocas veces acorde a la actividad, son de los principales motivadores para que surjan nuevos modelos de negocio y con esto la exterminio de la comunicación tradicional puesto que las audiencias también evolucionan. Cuando juntas: Crisis, innovación, riesgo, experiencia y confianza, aparecen inmediatamente oportunidades que son tocadas por quienes salen de su zona de confort. La competencia profesional cada día es mayor, así que valorar el talento y la dedicación es poco realista frente a un mercado de evolución laboral constante y totalmente acelerada. Ser parte de una nomina laboral, no te asegura la permanencia, pero la innovación no tiene limites si está bien establecida. Al buscar empleo, nos limitamos a mantener una relación con más costos que beneficios. Mientras que la innovación, te invita a probar con tu talento nuevas oportunidades. Estas oportunidades esperan que optemos por la puerta de salida, la misma que podría llevarte a la libertad responsable hacia la independencia laboral, dando pie a oportunidades que serán parte de este momento de cambio en el mundo. Imagen cortesía Shutterstock
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