Un lugar para las mentes diferentes, donde las personas con trastornos creativos pueden ser ellas y además les pagan por eso. En este peculiar sitio hay diferentes grupos de personas, las que sufren de Ansiedad Selectiva Ejecutiva generalmente tienen dificultades para entender el tiempo, para ellas todo es urgente y si no se hace lo que quieren en el preciso momento que creen necesitarlo el mundo va a acabar, entre los trastornos creativos hay diferentes sub grupos: Creativo Compulsivo: Está obsesionado con leones y presume verlos en todas partes, suele creer que es un Rockstar o a veces Leonardo da Vinci, jura que el mundo gira alrededor de él. Psicosis del comediante: No se calla ni un segundo y tiene la capacidad de hablar de cualquier tema así no tenga ni idea, siempre tiene un chiste para contar y debe ser en todo momento el centro de atención por su peculiar elocuencia. Depredes Sociales: Estos publican cada 2 minutos en sus redes desde un chiste hasta fotos de lo que comen todos los días, padecen de tener amigos imaginarios virtuales y si sueltan su teléfono un segundo creen que morirán. Hipsteritis Crónica: Estos creen que nunca se es demasiado hípster, la irreverencia los lleva a hacer combinaciones “nunca antes vistas” y todos ellos padecen de creerse originales y diferentes. Benjamin Buttonitis: No caen en cuenta que crecieron y aún se visten y se comportan como niños, si pudieran traer lonchera lo harían. TrastorNoMoney: Son aquellos que estrenan todos los días, gastan mucho en muñequitos y tatuajes pero nunca tienen dinero. Cabe anotar que todos ellos hablan solos y pasan bastante tiempo mirando una hoja en blanco o un punto fijo, lo que los une es una función en común: Lograr saber qué quieren los que padecen del Síndrome de Melosétodo (clientes). En el Manicomio Publicitario las personas andan con peinados raros y camisas coloridas, se la pasan hablando entre ellos o frente a un computador y padecen comportamiento impulsivo creativo. El que no trabaja en este negocio es muy difícil que entienda cómo un grupo de locos puede cambiar el mundo, menos mal no lo entienden, porque de ser así todos querrían trabajar en un manicomio publicitario.
Comentarios