El jueves 23 de junio de 2016 se firmó el cese al fuego entre las FARC (Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia), la guerrilla más grande de América Latina y la más antigua; y el gobierno de Colombia, en la Habana, Cuba. Desde ese día millones de personas se han pronunciado en pro y en contra de lo que ha pasado, ¡es historia! Esto nunca antes se había visto en nuestro país, ni mucho menos después de tanto tiempo. Lo que ahora me pregunto es ¿será que sí se firmó “la paz” o solo fue una muy buena campaña por ambas partes para esconder la cantidad de problemas y desfalcos graves por los que está viviendo el país? Según la RAE la palabra paz cuenta con más de 20 significados, entre los que destaco los primeros 5:
- Situación en la que no existe lucha armada en un país o entre países.
- Relación de armonía entre las personas, sin enfrentamientos ni conflictos.
- Acuerdo alcanzado entre las naciones por el que se pone fin a una guerra.
- Ausencia de ruido o ajetreo en un lugar o en un momento.
- Estado de quien no está perturbado por ningún conflicto o inquietud. Disfrutar de una paz profunda.
¿Será que todo fue una cortina de humo para olvidar todo el daño que hicieron esos desadaptados, secuestradores, torturadores, violadores y asesinos? Hoy mi país me duele, no quiero pensar que todo es un engaño ya que sé que como signo de “supervivencia” el cerebro humano siempre tiende a ser positivo, pero no puedo evitar estar a la defensiva y ser desconfiada, porque bien o mal mi familia también fue víctima de esos asesinos. En cuanto al tema de la creatividad, espero que no haya sido obra maestra de un publicista el lavarnos el cerebro para creer en un falso positivo que siempre va a estar en nuestra contra, por ocultar los malos precios del petróleo y del café, los feminicidios, los altos salarios a los congresistas que lo único que hacen es dormir en su puesto de trabajo, el gran daño ecológico que provocó esa guerrilla gracias a la minería ilegal que produjo la extracción de mercurio en cantidades alarmantes, contaminando las quebradas y ríos cercanos, y peor aún, secando miles de ríos y quebradas gracias a esa mala práctica. Entre todo lo que los mandatarios de Colombia esconden, solo espero que esto de la paz sea en serio y no haya sido una estrategia publicitaria en pro de la imagen de la guerrilla y del gobierno. Hoy me duele mi país y mi cabeza se llena de miles de preguntas que quizá solo el tiempo sea el adecuado para contestar. Imagen cortesía de iStock
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