Un rostro y una figura fácilmente reconocible que ha dejado huella desde sus días dorados hasta la actualidad. Un icono americano que trascendió épocas y fronteras. Bettie Page fue una mujer que iba más allá del tiempo que le tocó vivir. El año 1949 en el que esperaba una prueba de cámara que impulsara una carrera en las artes dramaticas y tuvo que ejercer como secretaria, pero un encuentro casual en un rutinario paseo la llevó a convertirse en el icono que hoy es. Con su atractiva figura y rostro, muy pronto se hizo conocida, apareciendo en multitud de publicaciones, y sus sugerentes fotografías decoraban espacios de trabajo y habitaciones por todo el país. Page a menudo tomaba el control de las sesiones fotográficas y las dirigía, su potencial creativo permitía que mejorara el resultado con las instrucciones que ella misma daba. Ademas de ser pionera en el mundo bondage, sus imágenes de selva y de playa transmitían gran belleza, pues Bettie Page nunca mostraba escenas de sexo explícito ni desnudez integral. Jugaba con los escenarios en los que se desarrollaba cada sesión fotográfica, siempre sacándoles el mayor partido, para obtener el mejor de los resultados. Casi a la vez que Marilyn Monroe estudiaba en el Actors Studio, Bettie lo hacía en el Berghof Studios sin ambiciones, tan sólo tratando de probarse a si misma y comprobar sus capacidades como actriz, cuya prueba llegó a impresionar al propio Berghof, lo que le proporcionó varios papeles en teatro, apariciones en televisión, y tres filmes independientes. Con el fin de la década de los cincuenta, Bettie Page fue dejando el mundo en el que había estado envuelta todos aquellos años, atraída con el cristianismo y su ambiente, saliendo de la vida pública gradualmente. La estética de Katy Perry, la trayectoria de Dita Von Teese, la obsesiva afición de Rihanna por el cuero, la existincia de las Pussycat Dolls, nada de eso pordría explicarse sin la existencia y el legado de Bettie Page, una mujer que en la época más conformista de aquel país, logro desinhibirlo un poco y consiguió construir su propia imagen de marca distintiva, principalmente por su actitud e impactando con su peinado, un flequillo peinado hacia delante, que inicialmente era para evitar que reflejase la luz en su frente a la hora de disparar fotografías. Un flequillo icónico que aún hoy en día es empleado como peinado predilecto por muchas mujeres y que reivindica su figura, la de la reina de las pinup.
Comentarios