A mediados de mayo, la Real Academia Española (RAE) y la Academia de Publicidad (AP) de España realizaron la jornada de debate “¿Se habla español en la publicidad?” en la que expusieron el abuso de los extranjerismos en la publicidad y defendieron el uso de la lengua española en lo publicitario. Tomando lo anterior como pretexto, ambas instituciones lanzaron una campaña que logró evidenciar que hoy por hoy las marcas no pueden dejar de utilizar palabras en inglés en la mayoría de sus anuncios, pues con esto pretenden dar una imagen más sofisticada a los productos que promocionan y de las satisfacciones que obtendrán sus compradores. https://www.youtube.com/watch?v=KVlEElFtkVg Como era de esperarse, muchas personas a las que alcanzó esta (falsa) campaña, no dudaron en realizar su pedido inmediatamente. Aunque la reflexión de la RAE y la AP va encaminada al uso y abuso de la lengua inglesa a la hora en que los países hispanoparlantes creamos publicidad, la realidad es que la invasión de anglicismos alcanza a todos los sectores imaginables. En este presente globalizado, una de las áreas que más utiliza anglicismos en su entera forma de operar es la del marketing (también conocido como mercadotecnia). Quienes se dedican a esto están familiarizados con un argot en el que una buena parte de los términos que se utilizan provienen de una lengua extranjera, principalmente del inglés. Y es que ningún mercadólogo se imagina en una junta presentando una estrategia que contemple “publicidad por emplazamiento” en lugar de product placement o una “página de aterrizaje” en vez de landing page. En cualquier caso, no es difícil deducir que el uso de todos estos términos en inglés no obedece a tener un mejor entendimiento entre profesionales, ni a utilizar una terminología consensuada que será comprendida por los hablantes de cualquier idioma del mundo. La realidad es que la anglosaturación no puede deberse a otra cosa que la de aparentar un nivel intelectual y laboral superior, a pesar de que cualquier persona puede aprenderse un puñado de términos en inglés y utilizarlos con familiaridad. Aunque los esfuerzos de la Real Academia Española por fomentar el buen uso del castellano sean genuinos, cuesta trabajo pensar que los paradigmas van a cambiar. Puede resultar triste (y trillado) pensar que a pesar de ser dueños de uno de los idiomas más vastos, no lo aprovechemos y prefiramos importar vocablos de otras lenguas, sin embargo es importante tener siempre presente que el amor que le tenemos al inglés, en todos los ámbitos imaginables, no se podría explicar sin la influencia de la publicidad, esa que nos hace sentir más cool con todo lo que se anuncia en inglés. AUTOR Óscar Ocampo Vilchis Senior Consultant en Comunicación Spread. Periodista especializado en cultura pop con experiencia en medios impresos y digitales, mercadotecnia digital y relaciones públicas. Amante del humor absurdo. Twitter: @thepor8
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