Cuando los equipos de marketing se dieron cuenta de las ventajas que se obtenían al interactuar con el público objetivo en sitios online, el presupuesto destinado a marketing en redes sociales creció como la espuma. Sin embargo todavía hoy hay muchas marcas que no consiguen encontrar la manera más efectiva de llegar a su público y entablar conversaciones con él. La era de las redes sociales Desde siempre, el marketing se ha centrado en objetivos muy específicos, con campañas creadas para promover la conciencia de marca, conseguir nuevos clientes y retener a los que ya tienen. ¿Qué ocurre ahora? ¡Lo mismo! Pero en un escenario diferente. 
El mundo de las redes sociales no es tan distinto. Lo único que cambia es la oportunidad que tienen los equipos de marketing de interactuar y conversar con su público objetivo. En vez de lanzar mensajes unidireccionales con poco o nada de feedback, de “meter por los ojos” la información que quieren transmitir, ahora se puede comunicar el mensaje de una manera más sutil y formando parte de una conversación. Este nuevo diálogo social provee de feedback instantáneo que ayuda a direccionar y seguir mejorando las tácticas de marketing. La cruda realidad El sueño que todos compartimos es crear ese contenido genial que se haga viral por sí solo y que termine en boca de todos en las redes sociales, con tweets, posts, likes, shares… ¡Y miles de nuevos seguidores para nuestra marca!
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Pero que ocurra esto suele ser la excepción y la cruda realidad del día a día de las agencias y de los departamentos de marketing de las marcas es muy diferente. El reto al que nos enfrentamos es hacer destacar nuestro contenido de entre miles de ideas similares que pugnan por triunfar. ¿Cuál es la clave para hacerlo bien? Basarse en una idea o necesidad con la que poder conectar con el público objetivo. El primer paso para encontrar esta idea es llevar a cabo una monitorización de las redes sociales. Escuchar las conversaciones online de tu público objetivo para descubrir qué les preocupa, qué necesitan, qué están buscando. Imagina ser el nuevo en un grupo de amigos o compañeros de trabajo. ¿Empezarías a hablar sin más o esperarías a escuchar a los demás antes de participar en la conversación? Lo que pasa en la vida real ocurre también en el mundo online y con tus clientes. A nadie le gusta la sensación de no ser escuchado, comprendido o quedarse sin una respuesta. La escucha no se trata solo de averiguar qué es lo que le interesa a tu audiencia. También se trata de conocer dónde y cómo puedes interactuar con ellos. Puedes intuir, y estarás en lo cierto, que la mayoría de las conversaciones tienen lugar en las principales redes sociales como Twitter o Facebook, pero también hay conversaciones quizás más reducidas en número de participantes, pero no en importancia, que suceden en foros, blogs, etc. Precisión en el público objetivo La verdadera revolución de las redes sociales es que han permitido llegar con precisión a nuestro público objetivo. 
Para encontrarlo necesitas realizar una buena escucha de las redes sociales y luego llevar una buena gestión de las mismas. Estos son algunos pasos que puedes seguir:
- Escuchar no solo las conversaciones sobre tu marca, sino sobre el sector en general, para tener una mejor visión de conjunto.
- Buscar las tendencias que se crean en las redes sociales y formar parte de ellas.
- Monitorizar a tus competidores para aprender de sus fallos y de sus victorias.
- Participar y responder para añadir valor a las conversaciones.
Mejores prácticas en las redes sociales No hay una receta que pueda garantizar el éxito en las redes sociales, pero estas pautas te pueden ayudar con la gestión de tus cuentas:
- Transparencia: Ayuda a que tu comunidad vea a tu compañía como algo más que un logo o un producto.
- Añadir valor: La gente acude a las redes sociales en busca de una solución a un problema o para aprender, ayúdales en lo que puedas.
- Se realista: Que no sea una persona de marketing quien responda a la queja de un cliente o acerca del desarrollo de producto, espera a la persona adecuada para responder.
- Informa y educa sin tratar de vender: Asegúrate de que el contenido que compartes realmente ayuda a responder preguntas en vez de promover tu producto o servicio.
- Nunca mientas: Si no estás seguro, comprueba hasta la saciedad la veracidad de tus afirmaciones antes de publicar nada.
- Acógete a una política en redes sociales: cuidado con la controversia que se puede crear (¡en minutos!). Al publicar, pregúntate siempre si lo que vas a decir está en concordancia con la política de tu empresa.
- Conversa: Estate preparado para responder cuando participas en la conversación. A la gente no le gusta ser ignorada.
- Participa en foros de terceras personas: Si tienes tu propio foro online, demuestra tu respeto por las opiniones de los demás participando también en sus foros.
- No cejes en tus esfuerzos en las redes sociales: Una presencia interrumpida en redes puede interpretarse como un “no me importa” hacia tu comunidad.
Todo llega La moraleja de esta historia es que merece la pena ser constante y trabajar duro cada día. No podemos querer que todo ocurra en el primer mes, contruir una presencia de marca y gestionarla en la redes sociales es un proceso que requiere de tiempo y mimo. Trabajar en un contenido que interese a nuestra comunidad y ofrecer novedades regularmente es la mejor manera de hacerlo, y no caer en la tentación de comprar seguidores u otro tipo de prácticas no tan transparentes. Poco a poco todo llega: los seguidores, los comentarios, los “me gusta”… el reconocimiento a nuestro esfuerzo. AUTOR: Leyre Cabañas Durante muchos años he trabajado en agencias de publicidad. Ahora estoy en el departamento de marketing de Brandwatch, donde me encargo del mercado latinoamericano y español. Soy muy curiosa y lo que más me gusta es leer y continuar aprendiendo cosas nuevas cada día.
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