Bueno, hoy dejaré de lado la onda sería, bloqueos creativos, las quejas y demás cosas de las que hemos estado escribiendo todos por aquí. Ser publicista es complicado por donde se vea, en realidad la mayoría de la gente entiende bien lo que hace un arquitecto, un abogado o un periodista, pero cuando la banda o la familia escucha que eres publicista se imagina de todo, menos lo que de verdad hacemos. De las cosas más lindas que he escuchado es: que si somos licenciados en rótulos, que si hacemos invitaciones para cualquier tipo de eventos y que dibujamos chingón. De alguna manera está feo que nuestra familia, novia o lo que sea no pueda y no sepa presumirnos ante los contadores y financieros que conocen por montones, así que intentaré darle armas a la gente que nos rodea para que pueda explicar de mejor manera qué es lo que hacemos. Así que la próxima vez que te digan ¿qué hace un publicista? contestes siempre lo siguiente: Un publicista sueña, imagina mundos, personajes e historias… inspira a la gente a hacer lo que siempre se ha creído imposible, desafía a deportistas a romper nuevas marcas, les da consejos a las chicas para que sean tratadas como reinas, concientiza y comparte lo difícil que es la vida para algunos chicos, ayuda a los papás a tener las palabras correctas para el sí acepto de la vida de sus hijas, intenta aportar felicidad a un día cualquiera, intenta dar esperanza ante cualquier cosa. Bueno quizá exagero un poco, y quizá no hacemos tantas cosas tan importantes como los doctores o los científicos, pero sería el colmo no inventarnos qué hacemos o cómo es nuestro trabajo si el pan nuestro de cada día es fantasear un poco. Así que si sus hermana, novia, suegra, tía, vecina, cantinero, despachador, barbero, amigo, amante lo que sea vuelve a preguntar qué hace un publicista, ya saben que contestar. ¡Sin miedo! ¡Con orgullo! AUTOR Imagen cortesía de iStock
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