Nadie fotografía lo que no quiere recordar.

Instagram ha ayudado a nuestro fotógrafo interior a salir y aparecer en las fotos, sin embargo, para los verdaderos amantes de los recuerdos plasmados, es indispensable el poder de los espejos. Últimamente, hemos vuelto a encontrar con las antiguas cámaras análogas, celulares con los que podemos conseguir imágenes de gran calidad, las hermosas cámaras profesionales y de un sin fin de aplicaciones para plasmar cada momento. Las cámaras análogas han pasado de ser un gran invento a un hermoso recuerdo para todos los que alguna vez tuvimos una y gracias al haluro de plata vimos nuestros recuerdos plasmados en papel. Un buen fotógrafo puede ser instagramer, pero un instagramer no siempre es un buen fotógrafo. Sin cámaras réflex nunca saldrás de Instagram. Estamos inmersos en el mundo de formas, queremos fotografiar todo lo que encontramos a nuestro paso, no es coincidencia que los pies y los perros sena los protagonistas de la gran mayoría de las fotografías en la red, y para hacerlo tenemos gran cantidad de cámaras profesionales con las que podemos captarlo todo. El maravilloso arte de la imagen se basa en pasión, buen gusto, composición. Pero podemos sintetizarlo en el manejo experto y control de luz. Ser fotógrafo significa vivir para siempre los momentos felices ya que nadie fotografía lo que no quiere recordar.