La moneda, ese material que mueve al mundo desde hace varios siglos es el que satisface la mayoría de nuestras necesidades. Pero hay algunas de ellas que no pueden ser cubiertas no por falta de dinero, sino por falta de tiempo. Cronobank, el primer banco mundial de tiempo, ha surgido con el fin de intercambiar tiempo entre personas de todo el mundo. El objetivo es que las personas ganen tiempo en su vida diaria pidiendo ayuda a otras para que realicen alguna actividad y así puedan, a su vez, ayudar a otras personas. Por ejemplo, una persona en México necesita revisar un libro. Un experto en textos de España invierte 3 horas en la revisión del libro. Pero él a su vez recibió ayuda de una vecina que le hizo de comer. La persona de México, con el tiempo que ganó al no revisar el libro, puede asistir a una obra de beneficencia que solicitó personal. ¿Qué nos indica este tipo de servicios? Esto nos dice que hay necesidades en la sociedad que no han sido vistas. También resulta un buen ejemplo de lo que las personas están dispuestas a realizar para pensar en otras soluciones. Y por último, nos muestra que romper paradigmas nos deja derribar límites que impiden nuestra visión.
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