Tienen alma de comunicadores, habilidades de redacción y mente analítica. Ellos son los Community managers, que han logrado dar a las marcas una imagen más amigable y cercana a las personas. Pero sabemos que no todo es felicidad: para ser CM hay que tener mucho más que pasión por las redes sociales. Sabemos que las vacaciones son una ficción, pues su responsabilidad no los deja descansar sabiendo que alguien podría estar pidiendo ayuda en las redes sociales. Sabemos que, además de tener los ojos en las redes, hay que tenerlos en revistas, libros para estar actualizados y poder hablar de cualquier tema. También, debemos tener la habilidad de desarrollar varias personalidades. No es lo mismo hablar como una marca seria a hablar para una marca infantil, manteniendo, además, el anonimato. Lo más difícil es mantener las emociones neutrales al lidiar con los usuarios que preguntan, atacan o mandan información que nos distrae del arduo trabajo que implica ser un Community Manager. ¡Felicidades! Imagen cortesía de Fotolia.
Discussion about this post