Construir una imagen de marca y posicionarse es cuestión de tiempo y estrategias. Perder la imagen o tan sólo cambiar el logotipo es una tarea que debe realizarse con cuidado para no confundir a los consumidores y para no perder la arquitectura de marca, sobre todo si se trata de una marca reconocida a nivel mundial como Burger King. Esta cadena de comida rápida ha presentado algunos cambios en redes sociales y en algunos establecimientos. Su nombre, “el rey de las hamburguesas”, cambió por “Fries King” junto con una modificación al logo en el que se muestra una bolsa de papas fritas. Además, anunció a través de Twitter “Fries so good, they’ve inspired a new era. BURGER KING is now #FRIESKING!” La referencia que hace a las papas a la francesa es porque lanzaron unas que tienen 30% menos calorías que las de su eterna competencia (McDonald’s), encontrando un parea de oportunidad en ese producto. La pregunta es, ¿se trata sólo de una campaña para promover las papas o realmente cambiarán su producto protagonista para hacer frente a la competencia? Sea cual sea el propósito, lo que ha logrado la marca es que se hable de ella. Por un lado, los profesionistas de la publicidad opinan que es una acción arriesgada, mientras que los usuarios de Twitter han confesado cierta confusión, pues los cambios no se han aplicado por completo.
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