Una gran diversidad de marcas ha adoptado a las máquinas expendedoras como su estandarte cuando se trata de hacer publicidad BTL. La participación de las personas es tal, que resulta una gran fórmula para atraer clientes y, con ello, cumplir con los objetivos que se tienen planteados.
Y es que las máquinas expendedoras resultan muy atractivas cuando los productos en su interior son gratuitos. Por lo tanto, cuando eso sucede, la gente, en una aceptable mayoría, está dispuesta a participar en lo que la marca le haga hacer. Su afán de conseguir lo expuesto es tanto, que incluso es capaz de hacer grandes esfuerzos, mismos que no se harían generalmente de no existir un incentivo que la motivara.
Este es el ejemplo que muestra la marca de cerveza Castle Lite con su Mind Reading Beer Machine, una máquina que lee la mente para ver qué tan grande es el deseo de la gente por cerveza bien fría. Porque, según la hipótesis de esta cervecera, si en algo piensa el hombre, más que en cualquier otra cosa, es en cerveza helada (incluso más que en mujeres). Por eso, esta máquina resulta un buen artefacto para comprobar dicha teoría y con ello recompensar a las personas que verdaderamente se concentren en pensar en cerveza.
¿En qué consiste? Simplemente en un dispositivo conectado a la máquina, que se coloca en la cabeza de la persona para comprobar su deseo de cerveza Castle. Mientras mayor sea el deseo, mayor cantidad de cerveza dará la máquina.
¿Una máquina expendedora, que funcione con la mente, de manera gratuita y que regale cerveza? Seguro que a más de uno le encantaría encontrarse por la calle con alguna de estas maravillas.