La mercadotecnia con ayuda de la sociología a lo largo de los años ha determinado generaciones: grupos de personas con gustos y preferencias en común principalmente determinado por factores socio-económicos de la época. La última generación que se determinó son “millennials” pero antes de hablar de estas personas, recordemos algunas generaciones que precedieron. Baby bommers, generación de fines de los 60’s de espíritu libre y pro causas sociales. Sus actividades laborales eran totalmente metódicas, repetitivas, y me atrevo a aseverar que en general eran bastante aburridas. Las actividades laborales eran un reflejo de la vida social, se trabajaba duro día a día para tener el estatus social anhelado, que siempre estaba ligado a la clásica, tradicional y numerosa familia feliz. Estos jefes de familias tenían como marcas predilectas a: Scappino, Burberry, Paul & Shark, Ferragamo, Gucci, Mont Blanc y Sony por mencionar algunas. La generación X, son los hijos de los últimos boomers. El mundo de estos jóvenes empieza a expandirse gracias a la tecnología; la telefonía, la TV de paga y el inicio del uso de Internet. El clima social contrasta; violencia, drogas sintéticas y nuevas enfermedades como el SIDA. El resultado es un escepticismo generalizado, sentimiento que capitalizaron marcas como Nike con el eslogan “Just do it”. Bill Clinton, Michael Jackson y Madona son personajes que enmarcan el cuadro “X”. Una vez recordados algunos antecedentes, pasemos a lo que nos atañe, los Millennials, jóvenes emprendedores con una mentalidad digital colectiva. Definitivamente no es un término acuñado al vapor, Richard Strauss, hace ya varios años empezó a describir la generación también llamada Net Generation. El multitasking, es la constante en entretenimiento, trabajo o educación. Mandar un mensaje de texto por el móvil mientras se lee un blog y se escucha la rola del momento en Groveshark; son actividades comunes para estos jóvenes. Son consumidores que han sufrido una sobre exposición a la publicidad, por lo que buscan mayor información de los productos y servicios que comprarán. En foros y sitios especializados comparten sus experiencias de compra, ayudando a forjar buenas reputaciones o a destruir marcas. Así que, las marcas que enfocan sus productos a personas nacidas después de 1982 (y hasta el 2000) recuerden que los valores de que habían generado en el pasado deben cambiar para poder ser una de las marcas predilectas de los millennials. Fotos cortesía de Fotolia.
Comentarios