Muchos desean ser creativos, soñadores de la publicidad. Muchos desean ser diseñadores, dibujantes del rostro de las marcas. Otros desean ser planeadores expertos y ejecutar campañas nacionales. Y otros, sí, buscan la fama, la gloria. Pero antes de llegar a las alturas hay que desanudar ciertas ataduras. ¿Cómo hacer que el director creativo aprecie nuestra redacción si todavía no generamos ideas? ¿Cómo enfrento las negativas a mi ideas? Los jóvenes recién entrados en agencia de publicidad se quedan con la boca abierta cuando se ven obligados a hacer trabajos rudimentarios. Muchos renuncian. Te ofrecemos cuatro razones por las cuales perseverar en el mundo de la publicidad: ¿Por qué voy a hacer presentaciones todos los días? Porque haciéndolas aprendo el manejo de una campaña, por eso. ¿Por qué voy a redactar spots aburridos si yo quiero pensar en grandes ideas? Porque redactando aprendo cómo estructurar un concepto. ¿Por qué voy a inspeccionar producciones de otras personas, de otros creativos? Bueno, porque así comprendo las menudencias de una filmación, porque aprendo sobre actuación, sobre iluminación, sobre sonorización y acústica. ¿Por qué me voy a quedar más tarde que todos en la agencia? Porque amo lo que hago. Fotografía cortesía de Fotolia
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