A lo largo de la historia de la publicidad se sabe que existen algunos casos de supuestos mensajes subliminales. Entre los más conocidos son los de Marlboro, los de Coca Cola en el cine y hasta en ciertas escenas de películas de Disney, supuestamente. Pero ¿qué tanto es verdad la presencia de mensajes ocultos en la publicidad de las marcas y qué tanto es inventado por los ociosos? La publicidad subliminal es uno de los motivos por los cuales la gente cree que mercadólogos y publicistas se reúnen para crear mensajes malvados con el fin de obligar a las mentes desprotegidas a consumir compulsivamente. Esto es un total mito, y aun así hay personas que supuestamente se dedican a descubrir esos mensajes. Pero ¿qué es lo que buscan estos “investigadores”? Los casos de mensajes subliminales siempre resultan tener contenido sexual o incitaciones de este tipo, que van desde lenguas, labios, falos o hasta la palabra “sexo” en distintos idiomas dentro de los gráficos publicitarios. Y cuando se encuentran estos supuestos mensajes, las personas argumentan que el éxito de las grandes marcas es gracias a estas herramientas. Resulta ser que el erotismo es uno de los mayores impulsos del hombre, y cualquier satisfacción que desean la comparan con la satisfacción sexual por ser la más potente. Es por ello que este impulso se ha asociado a varias marcas conscientemente como el caso de AXE, o inconsciente como el gráfico de los cigarros Camel, lo que ha bastado para desatar los mitos de los contenidos sexuales de las grandes marcas. En la mayoría de los casos actuales, los mensajes encontrados son sólo la imaginación poco sana de las personas que se dedican a encontrar figurillas en los gráficos o en los comerciales. También existe la creencia de que en las caricaturas infantiles hay mensajes sexuales pero, a todo esto pensemos ¿en verdad un dibujillo oculto será suficiente para aumentar las ventas? En todo caso, lo único que aumentará será la polémica.
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